El Colegio de Ópticos-Optometristas de Castilla y León ha considerado "más necesaria que nunca" la revisión ocular de los escolares antes de la vuelta al cole ya que llevan seis meses "sin pisar las aulas" tras el confinamiento y el verano.

Según han señalado fuentes de esta entidad colegial en un comunicado recogido por Europa Press, "es fundamental afrontar el nuevo curso con una correcta visión que garantice el desarrollo social y educacional de niños y adolescentes".

Así, han advertido de que "en muchos casos, las malas notas o el desinterés de los más pequeños no son consecuencia de su apatía, sino de algún defecto visual que les impide seguir el ritmo de las clases".

En poco más de una semana se iniciará la vuelta a las aulas en Castilla y León de forma presencial, para retomar las clases después de más de seis meses, entre el confinamiento debido a la pandemia del coronavirus y las vacaciones de verano.

En este contexto, la salud visual es este año "más relevante que nunca para afrontar sin problemas añadidos un curso académico especial, que no sólo arrastra materias pendientes del anterior, sino también algunos problemas visuales no resueltos por el aumento de la formación 'online' desde marzo y el uso continuado de dispositivos electrónicos".

"Los profesionales de la visión siempre hemos recomendado una revisión anual de los niños al inicio del curso para completar su preparación, pero en las circunstancias especiales de este año, cuando no podemos aventurar cómo será la docencia a lo largo de todo el curso -si toda presencial, toda 'online' o mixta- hemos de ser más conscientes de lo que puede afectar una visión inadecuada al rendimiento escolar", ha asegurado la decana del Colegio de Ópticos-Optometristas de Castilla y León (COOCYL), Inmaculada Aparicio.

"Seamos previsores", ha enfatizado, porque "en ocasiones se puede evitar un sobreesfuerzo simplemente con una buena ergonomía visual" y, para ello, el profesional de la visión, su óptico-optometrista, realizará un examen visual que establecerá las necesidades visuales del niño.

De hecho, como explica, por su parte, la secretaria general de COOCYL, Ana Belén Cisneros, "los primeros años de vida son una etapa crítica para el desarrollo visual", y por ello, "una buena visión en edades tempranas es imprescindible para el desarrollo social y educacional y fundamental para potenciar el aprendizaje y el rendimiento durante la etapa escolar y en años posteriores".

Esto implica no solo tener una buena agudeza visual, sino también muchas otras habilidades, como pueden ser la capacidad de enfoque lejos-cerca, la habilidad de mover los ojos correctamente, tener una binocularidad adecuada, una buena coordinación ojo- mano o una adecuada estereopsis (cálculo correcto de la profundidad).