La formación de base de un optometrista es la carrera de Óptica y Optometría, que se completa con formaciones especializadas. Es una profesión que exige una constante formación para estar actualizado con las últimas novedades si se quiere prestar un buen servicio.
La optometría comportamental es eficaz en el tratamiento de los siguientes problemas:
- Problemas de atención (por falta o exceso de ésta)
- Problemas de memoria
- Lenguaje y habla
- Dislexia o disfemias (tartamudez)
- Problemas acomodativos de la vista
- Estrabismo
- Ambliopía (ojo vago)
- Presbicia, vista cansada
- Problemas binoculares
- Problemas oculomotores
- Problemas refractivos
Se trata de averiguar el origen del problema, el que ocasiona los síntomas que hacen venir a esos niños a la consulta, y empezamos a trabajar a partir de ahí.